Conseguir un verdadero hogar, cálido y agradable en invierno a veces es misión imposible. Quizás porque son muchos los tipos de estufa existentes en el mercado y mucha gente no sabe qué tener en cuenta a la hora de escogerlas. En un año climatológicamente raro como es este en el que nos encontramos, conviene conocer qué tipos de estufas hay. ¡No vaya a ser que venga una segunda Filomena!
Estufas eléctricas o calefactores
Las estufas eléctricas son los aparatos de climatización más socorridos. Su principal ventaja es el precio, así como, en la mayoría de las ocasiones, su carácter portátil. No son artículos muy pesados, de manera que puedes llevar tu calefactor de aquí para allá para caldear la estancia en la que te encuentres en cada momento. ¿Su inconveniente? Su elevado consumo de electricidad. Por este motivo, no conviene tener estas estufas encendidas durante mucho tiempo seguido, aunque sí sirven para calentar una habitación en poco tiempo.
Estufas de pellets
De un tiempo a esta parte, las estufas de pellets se han ganado un hueco importante en el hogar de muchos. Se han convertido, de hecho, en uno de los aparatos más demandados gracias a su fácil uso, a su escaso mantenimiento y, sobre todo, a que funcionan con combustible vegetal. Su principal inconveniente es su precio, aunque en realidad a la larga acaba compensando, dado que los pellets resultan bastante económicos. Esta clase de estufa resulta ideal para calentar grandes espacios.
Estufas de leña
Las estufas de leña son las reinas de las casas rústicas. Su combustible, como no podía ser de otra forma, es la madera, por lo que tendrás la sensación de que te hallas ante una chimenea de las de toda la vida. Probablemente su mayor inconveniente sea que precisan de un enorme mantenimiento. Además, es imprescindible instalar la estufa en un lugar bien ventilado. En cuanto a las ventajas, el combustible es barato y es una estufa de gran eficiencia.
Estufas de gas
Este tipo de estufas funciona con gas butano, si bien los modelos más avanzados disponen de una válvula de seguridad que corta el suministro en caso de fallo. Esto significa que son completamente seguras. En relación a sus ventajas, no son estufas muy caras y, además, resultan muy rápidas a la hora de calentar una estancia.
Estufas halógenas
Las estufas halógenas caldean el ambiente a través de unas resistencias eléctricas. Incorporan diferentes niveles de potencia, si bien están sobre todo orientadas a espacios pequeños, pues brindan calor muy directo. Muchos modelos son aptos para exteriores.
Estufas de bioetanol
Estos dispositivos funcionan gracias a un combustible líquido llamado bioetanol, un tipo de alcohol etílico. Son apropiados para usar en interiores y no requieren salida de humos. Un detalle que suele gustar mucho de estos aparatos es que tienen llamas reales, por lo que crean un ambiente muy acogedor. Como desventaja, son algo caros.
Ahora que conoces las características de cada estufa, te invitamos a curiosear nuestro catálogo, donde encontrarás las mejores opciones en función de tus necesidades.
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